Entiende el monstruo de la estufa
El calor fija la grasa y convierte las salpicaduras en costras. La solución no es raspar: es ablandar, remover y proteger.
Paso 1: ablandar (equipo frío)
Retira parrillas y quemadores.
Aplica Desengrasante Brio y espera 3–5 minutos.
Paso 2: remover sin dañar
Esponja no abrasiva en vitro/vidrio.
Cepillo en rendijas y perillas.
Espátula plástica para pegotes (nunca metálica).
Paso 3: proteger y mantener
Multiusos Brio para acabado y capa repelente.
Secar a favor de la veta en acero inoxidable.
Parrillas y quemadores: la llama también se limpia
Lava aparte con desengrasante diluido y revisa orificios para evitar llama irregular.
Trucos de cocción que evitan el terror
Tapas antisalpicaduras y bandejas recolectoras.
Limpieza el mismo día de salsas y azúcares.
Rutina que sí se sostiene
5 minutos diarios para repaso postcocina; una vez a la semana limpieza profunda con desmontaje.
Conclusión
Con Brio, la estufa deja de ser castigo: actúa, limpia y protege. El brillo vuelve y se queda.

